12 de Abril, 2025
Viven en interna desesperación. Todos distraídos con su teléfono porque ni siquiera ellos quieren estar consigo mismos. Despiertos, pero inconscientes. En movimiento, pero nunca hacia adelante.
No saben a donde van porque han entregado a otros la pluma del libro de su destino.
Persiguen dinero a costa de relaciones y principios, para al final, acabar sin relaciones, sin principios, y con muy poco dinero.
No conectan con otros porque cubren su identidad con la capa del ego. Han escondido tantas veces su personalidad al mundo que ni ellos mismos saben quienes son.
La más grande escasez es aquella que brinda abundancia externa y crisis interna.
Tienen todo al alcance de su mano y nada les satisface. Buscan la más mínima distracción que los aleje del tiempo presente, porque estar presente les aterra.
Están perdidos, buscando un camino que en realidad no existe, sino que aparece cuando uno se atreve a caminar.